Hyundai al borde de su primera huelga en siete años tras fracasar las negociaciones

Buenos Aires – Las negociaciones salariales y del convenio colectivo para 2025 entre Hyundai Motor y su sindicato llegaron a un punto muerto. Las posturas sobre temas clave como el aumento del sueldo básico y la extensión de la edad jubilatoria son irreconciliables. Tras dos semanas de estancamiento, las partes volvieron a sentarse a la mesa de diálogo la semana pasada, pero el encuentro solo sirvió para confirmar las profundas diferencias. Todo indica que esta semana será decisiva y podría marcar el inicio de una huelga, la primera en siete años.

Una oferta “decepcionante e insuficiente”

El 1 de septiembre, la filial de Hyundai del Sindicato Nacional de Trabajadores Metalúrgicos de Corea manifestó su total rechazo a la primera propuesta de la empresa. “Después de dos meses de negociación colectiva, la primera oferta presentada por la patronal es decepcionante e insuficiente”, declararon. “No podemos aceptar una propuesta que es pura formalidad y no refleja adecuadamente el esfuerzo y el sacrificio de nuestros afiliados”.

La propuesta de Hyundai, presentada el pasado 28 de agosto en la 19ª ronda de negociaciones en la planta de Ulsan, consistía en un aumento del sueldo básico de 87.000 wones. Además, ofrecía una bonificación por rendimiento e incentivos de un 350% del salario más 10 millones de wones en efectivo y 10 acciones de la compañía. Según la empresa, esta oferta era una compensación por el cumplimiento de los objetivos de negocio de 2025, la superación de la crisis del segundo semestre y la celebración de los premios automotrices globales obtenidos.

Las exigencias del sindicato y la jubilación como punto de quiebre

Por su parte, el sindicato exige un aumento del sueldo básico de 141.300 wones (sin contar los aumentos automáticos por antigüedad), el pago de una bonificación equivalente al 30% de las ganancias netas del año pasado, la inclusión de diversos pluses en el cálculo del salario ordinario y la creación o aumento de adicionales específicos por cargo y función.

Sin embargo, uno de los puntos más conflictivos discutidos en la última reunión es la extensión de la edad jubilatoria. El sindicato reclama que la edad de retiro, actualmente de 60 años, se extienda hasta los 64 años como máximo (el último día del año previo a empezar a cobrar la pensión nacional). La empresa ya anticipó que esta petición es inaceptable.

El llamado de la empresa a la moderación

Lee Dong-seok, CEO de Hyundai Motor, intentó calmar las aguas. “Presentamos esta oferta con la intención de generar un punto de inflexión en la negociación, aunque queden varios temas pendientes. Queremos que se entienda que esta propuesta es casi definitiva”, afirmó. Y agregó un pedido directo al gremio: “La negociación es un proceso donde la empresa y el sindicato se encuentran para dialogar y buscar un punto en común, no para que una de las partes acuse a la otra de que todo es insuficiente. Pedimos que amplíen su comprensión de la situación”.

“La cuenta regresiva para la huelga ha comenzado”

La respuesta del sindicato fue contundente y rechazó de plano la oferta, advirtiendo sobre la posibilidad real de un paro. “Hemos advertido claramente que la cuenta regresiva para la huelga ha comenzado. Si la empresa no presenta una propuesta superadora y responsable, el conflicto será inevitable”, comunicó el gremio.

Un representante sindical fue aún más lejos en sus declaraciones a la prensa: “La bronca de los 42.000 afiliados no es una emoción pasajera, es la humillación de sentir que pisotean nuestro orgullo, una energía que está a punto de estallar. Si siguen ignorando nuestras demandas, vamos a canalizar esa bronca a través de una huelga general”.

Aunque está previsto que las partes mantengan reuniones de trabajo a puertas cerradas para intentar acercar posiciones antes de una posible segunda oferta, las perspectivas de lograr un séptimo año consecutivo de acuerdo sin conflictos son muy bajas. El sindicato ya tiene el mandato legal para iniciar medidas de fuerza, tras una votación realizada el 25 de agosto en la que el 90,93% de los afiliados votó a favor de la huelga. Como primera medida de presión, anunciaron que a partir del próximo mes suspenderán las horas extra y el trabajo durante los sábados. El futuro inmediato de la automotriz se decidirá este 2 de septiembre, cuando el comité de huelga del sindicato se reúna para definir la fecha y la modalidad del paro.